Trabajo de parto y parto
El comienzo del trabajo de parto
El trabajo de parto comienza con la producción de cantidades grandes de prostaglandins, substancias estas que inician las contracciones uterinas
Una vez que el trabajo de parto ha comenzado, la hipófisis secreta ocitocina, una hormona que actúa en el músculo uterino para fortalecer y acelerar sus contracciones.
En la primeriza, el trabajo de parto puede durar hasta más de 24 horas. En las no primerizas, son normalmente más cortos y van de 3 a 12 horas.
Cuando las contracciones uterinas ocurren cada 5 minutos, llegó el tiempo de dirigirse al hospital o al IMO.
LAS TRES FASES DEL TRABAJO DE PARTO
PRIMERA FASE
La primera fase del parto empieza con las primeras contracciones rítmicas y termina cuando el cuello del útero está totalmente dilatado (dilatación completa)
Esta fase es la más larga y dura de 12 a 14 horas de promedio para la primeriza, y de 8 a 10 horas para las madres que han tenido otro parto.
Las contracciones normalmente empiezan ligeramente y duran 10 a 20 segundos, y vienen con un intervalo de cada 20 - a 30-minutos.
Cuando el trabajo de parto progresa y el cuello se dilata, las contracciones se hacen más frecuentes y duran más tiempo.
Hacia el final de la primera fase, pueden durar 40 a 50 segundos y pueden tener una frecuencia de cada 1 o 2 minutos. Esta suele ser la parte más difícil del trabajo de parto.
Si las membranas no se han roto espontáneamente, el doctor puede romper la bolsa de las aguas para facilitar el desarrollo de esta fase.
SEGUNDA FASE
La segunda fase empieza cuando el cuello se dilata totalmente y termina cuando el bebé nace.
Esta segunda fase normalmente dura aproximadamente 2 horas en la primeriza; en los nacimientos subsecuentes, puede durar sólo 5 a 30 minutos.
Al contrario de la primera fase, donde la mujer ha sido principalmente pasiva, en la segunda fase la presión de la cabeza del bebé en la pelvis provoca una sensación de pujo durante las contracciones para empujar al bebe hacia el canal del parto. Con la fuerza de las contracciones uterinas complementada por el pujo de la mujer, el bebé atraviesa la pelvis y nace.
Un episiotomía, precedida por una anestesia local, frecuentemente acorta la segunda fase y previene desgarros en el perin
TERCERA FASE
La tercera fase está comprendida entre el nacimiento del bebé y la expulsión de la placenta. Normalmente, esta fase toma sólo 5 a 10 minutos.
Si la placenta no se expulsa dentro de la media a una hora, el doctor debe extraerla mediante maniobras manuales (alumbramiento manual).
Después de la tercera fase, la episiotomía (si esta incisión se ha hecho) se sutura.
Normalmente se aplica una inyección de ocitocina para estimular las contracciones uterinas y así disminuir el sangrado del posparto.
CONTROL DEL DOLOR
Se usan drogas analgésicas y anestésicos en forma moderada porque cualquier droga dada a la madre cruzará la placenta y puede afectar adversamente el recién nacido. Se utiliza comúnmente la meperidina (Demerol).
La forma de anestesia generalmente utilizada para el control del dolor es la epidural o peridural.
CONSIDERACIONES ESPECIALES Y COMPLICACIONES DEL NACIMIENTO
Durante el trabajo de parto, la frecuencia de los latidos fetales, la frecuencia e intensidad de las contracciones y sus parámetros vitales son vigiladas y controladas por los profesionales que atienden su trabajo de parto. Estos controles permiten diagnosticar en forma temprana complicaciones y resolverlas inmediatamente.
INDUCCION DEL PARTO
Si existen problemas médicos tales cómo hipertensión arterial, retardo del crecimiento fetal intrauterino, rotura prematura de membranas con período latente prolongado (tiempo transcurrido entre la rotura de membranas y el parto), embarazo prolongado etc. Su médico puede considerar que el embarazo debe terminar, y el parto debe inducirse. Generalmente si indica para ello, un goteo con una hormona llamada ocitocina. A veces ante la presencia de un cuello uterino inmaduro ( no reblandecido) previamente al goteo se aplica en la vagina un preparado de una sustancia llamada prostaglandina. Debe destacarse que la inducción requiere paciencia y colaboración de la paciente y su entorno familiar ya que muchas veces son largas y tediosas.
NACIMIENTO POR CESAREA
La mayoría de los nacimientos por cesárea son inesperados, pero por un sufrimiento fetal agudo, se debe recurrir a un método que facilite una rápida extracción del bebé y la cesárea es la operación correcta.
La mamá pude sentirse defraudada ya que esperaba un parto vaginal, el papá puede sentirse inútil puesto que no puede colaborar en el nacimiento. Pero este trauma se supera fácilmente si su médico le ha explicado la necesidad de una cesárea de urgencia.
Obviamente no todas las cesáreas son de urgencia, en algunos casos se conoce desde el principio la necesidad de dar a luz a su bebé mediante una cesárea por la existencia previa de enfermedades que no aconsejan un parto vaginal (cardiopatías maternales, pelvis estrechas, etc.). Si al cesárea es programada, generalmente se efectúa una vez comprobado la madurez pulmonar fetal; esta se determina conociendo la edad del embarazo, y si existen dudas al respecto, muchas veces se recurre al estudio del líquido amniótico, por lo que debe efectuarse una amniocentesis.
La anestesia más utilizada para la cesárea es la epidural o peridural.
La incisión en la piel (corte) puede ser mediano infraumbilical longitudinal o un corte transversal suprapúbico.
Generalmente se utiliza el suprapúbico, pero a veces ante una emergencia, suele efectuarse el longitudinal porque requiere menor tiempo y otorga un mayor campo quirúrgico.
El procedimiento consiste someramente en :
1) Abrir el abdomen
2) Separar la vejiga del útero,
3) Abrir transversalmente en la parte inferior y anterior del útero (segmento)
4) Se extrae el bebé, se extrae la placenta,
5) Se sutura la brecha abierta en el útero,
6) Se coloca la vejiga en su sitio
7) Se cierra la cavidad abdominal por planos hasta la piel.
Si la recuperación y evolución postoperatoria es buena, puede retirarse del sanatorio entre los 3-4 días, pero la recuperación total requiere un tiempo que va de entre 4-6 semanas.
PARTO CON FORCEPS
Si bien en la obstetricia moderna el fórceps en su concepción antigua (con la cabeza alta) ha dejado de utilizarse, con la cabeza fetal baja (tercer plano) y con buena técnica es aún muy útil y salva muchas vidas fetales generalmente sin complicaciones maternas ni neonatales.